Registro de microchip equino es obligatorio para el Caballo Criollo Colombiano

Con el propósito de identificar a los caballos perdidos o robados, en Estados Unidos nació el microchip equino, un sistema de identificación magnética que es insertado en los ejemplares. En Colombia, el sistema fue establecido en abril de 1996 como el sistema obligatorio de identificación para ejemplares equinos.

Respecto a la composición de este dispositivo, Javier Amaya, director ejecutivo de Fedequinas, explicó que “el microchip es una pequeña cápsula de cristal especial que tiene un tamaño de un grano de arroz, la cual contiene un transpondedor con un código único que permite la identificación de animales. Dicho código trae un equipo individual por animal, el cual está compuesto por un jeringa desechable que trae comprimido en un área cercana al mandril y un dispositivo metálico envuelto en un revestimiento siliconado para que el caballo no lo rechace. El chip viene comprimido para que no se caiga y el émbolo de la jeringa además, es un émbolo de aguja que tiene la función de ser utilizado a manera de implante”.

Los empadronadores de Fedequinas, en su mayoría, utilizan el lector de forma longitudinal, de este modo, al ser detectado, se puede observar el código del microchip en la pantalla. Para leer el código, el lector emite una señal de radio que activa el chip.

Hasta el momento, en Colombia, Fedequinas ha implantado 169.743 microchips para la identificación de los ejemplares, de los cuales 104.220 son caballos y 65.523 son yeguas.

“A partir de 1996, Fedequinas estableció el microchip como un sistema obligatorio para el caballo Criollo colombiano y hoy en día todos los ejemplares registrados tienen que estar identificados con él. Es un sistema único de identificación, el cual es el complemento a la prueba de ADN que se necesita para identificar física y genéticamente al caballo Criollo colombiano”, Amaya.

En la actualidad, Fedequinas cuenta con 24 asociaciones federadas y avaladas para que puedan recibir la información del caballo Criollo colombiano de paso y, de este modo, puedan elaborar los registros.

Es de vital importancia que todos los ejemplares que vayan a ser registrados ante la Federación estén identificados con microchip. Del mismo modo, las asociaciones cuentan con más de 350 empadronadores que se dirigen al lugar en donde se encuentra el equino para registrarlo. Al año, son registrados con microchip más de 6.000 ejemplares del Criollo colombiano de paso.