Agro

¿Por qué la rotación de potreros puede ayudar a mitigar la degradación de las praderas?

El sistema consiste en alternar el uso y el descanso de los suelos para evitar su degradación, compactación y pérdida de fertilidad
Juliana Trujillo Velásquez
11 de noviembre de 2022

Para mitigar el impacto de la producción lechera y ganadera, se pueden llevar a cabo prácticas como la rotación de potreros. El sistema consiste en alternar el uso y descanso de las praderas; esto evitará el sobrepastoreo, el aumento de la degradación, la pérdida de fertilidad de los nutrientes en el suelo, el aumento de la compactación, la disminución de la infiltración y el aumento de la escorrentía. En contextos de producción de leche es altamente utilizado. Sin embargo, en producción ganadera de ceba aún persiste mayormente la práctica de pastoreo continuo.

"Consiste en que los animales permanezcan el menor tiempo posible en un potrero. Los potreros se pueden ir dividiendo diariamiente de acuerdo a la necesidad de consumo de los animales. Un bovino no debería permanecer más de 3 a 4 días en un potrero", explicó Fernando Morales, zootecnista y empresario del sector. Si estos animales pasan más de 4 días en una misma pradera se genera un problema de sobrepastoreo, lo cual genera un deterioro de los suelos, compactación de los mismos y una disminución de la productividad.

Se trata entonces de tener un periodo de ocupación y un periodo de descanso en las zonas para que la pradera se recupere. Este sistema existe por potreros definidos, por rotación en franjas, sistemas silvopastoriles en rotación y sistemas con barreras vivas. A futuro, se espera que se pueda implementar la rotación gracias a sistemas de geolocalización satelital.

Para implementar la rotación de potreros hay que tener en cuenta cuál es la oferta de forraje en el potrero. "Otro factor clave es la cantidad consumida por el animal, que regularmente está entre 10 y 12% de su peso en fresco, y 2% en materia seca", comentó. Es decir, una vaca que pese aproximadamente 500 kilos debería comer 60 kilos de forraje al día.

Un buen manejo de praderas también es indispensable. Se debe considerar su densidad y presencia de plantas arvenses, esto permitirá inferir cual es el potencial de carga animal por hectárea y los potenciales en el futuro, con base a las áreas y al inventario de la finca. Todo esto se debe identificar teniendo en cuenta la especie de los pastos. "No es lo mismo el pasto que se produce al nivel del mar, que aquel que se produce sobre las zonas medias o en la Sabana de Bogotá. Cada especie responde a diferentes tipos de suelo, radiación temperatura y humedad relativa", dijo.

Además de la degradación, el sobre pastoreo también genera un problema de escorrentía. "La escorrentía es el agua de lluvia que no infiltra en los suelos, sino que se va por encima del pasto", indicó. Para esto, Morales explica que una forma de solucionarlo es realizar el pastoreo de los animales en contra de la pendiente para quitarle velocidad al agua y mitigar los daños en infraestructura.

Una alta proporción de los productores en lechería especializada aplican pastoreo rotacional. Sin embargo, en la ganadería de ceba aún persiste el modelo de pastoreo continuo.

Entre más pequeños son los sistemas de producción, es más frecuente la práctica de rotación de potreros. "Por simple sentido común, los pequeños campesinos ya practican la rotación de potreros así no cuenten con mucha tecnología. Ellos amarran el animal a un estaca, dejan que se alimente y lo mueven a otro sitio. Eso ya es un sistema de rotación ", aseguró.

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