El año pasado, 11% del sacrificio total de ganado formal fue de reses de contrabando

El contrabando de ganado es uno de los temas más delicados a la hora de hablar de carne en Colombia. A pesar del crecimiento del sector luego de la recuperación del estatus sanitario contra la fiebre aftosa, proceso para el que fueron necesarias varias jornadas de vacunación, Fedegan estimó que entre 10% y 12% de los bovinos sacrificados en Colombia durante 2020 fueron ingresados al país de forma ilegal.

Del total de 2.968.484 cabezas de ganado que fueron sacrificadas a noviembre del año pasado, 5,27% menos que lo alcanzado en 2019, Fedegan consideró que por las fronteras nacionales entraron al menos 296.000 reses de contrabando. Aunque, según indicó el jefe de planeación y estudios económicos de esa federación, Óscar Cubillos, “al ser esta una actividad ilegal es muy difícil tener un dato exacto, por lo que solo tenemos estimaciones”.

El año pasado, en especial durante los meses de la cuarentena estricta, se vieron afectaciones económicas para el sector, pues se redujo el número de cabezas de ganado sacrificadas formalmente en 18,5% durante abril, y 18,1% en mayo. Para Cubillos, no es claro si la pandemia afectó o no a los contrabandistas, pues ante el deterioro en el nivel de ingreso de las familias, entraron al mercado productos más baratos e ilegales. “Desafortunadamente para el sector es el sacrificio clandestino que se nutre del contrabando”, agregó.

Lo que dicen las cifras oficiales, reportadas por la Policía Fiscal y Aduanera, es que en 2020 el número de aprehensiones de ganado de contrabando aumentó en 11%.

Desde 2018, el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), Fedegan y la Policía Fiscal y Aduanera han trabajado juntos en contra del contrabando agropecuario en Colombia, cuyo principal peligro es la falta de regulación sanitaria de los animales que ingresan al país. Aún cuando en Colombia se vacunaron más de 27 millones de bovinos en 2020, la entrada de reses no reguladas desde Venezuela u otros países vecinos pone en riesgo el estatus sanitario.

“Las expectativas de la ganadería colombiana para el presente año son amplias, trabajamos para mantener el estatus de país libre de fiebre aftosa con vacunación y apertura de nuevos mercados , mediante el trabajo articulado desde el gobierno nacional con autoridades y gremios para la competitividad en los mercados”, sostuvo la gerente general del ICA, Deyanira Barrero León.

En casos cuando el método de contrabando de cabezas de ganado es el hurto, los bovinos por lo general son sacrificados y comercializados en límites con Colombia. Mientras que, si se venden vivos, la más común es que llega un supuesto comercializador de ganado, quien ofrece dinero por los animales y se los lleva.

Con el objetivo de hacerle frente al contrabando y disminuir el riesgo de difusión de enfermedades que afectan la producción animal y vegetal por medio de carne no regulada en el territorio nacional, el año pasado, el ICA puso en funcionamiento diversas puestos de control a la movilización en diferentes regiones del país. También, a través de labores de patrullaje conjuntas en pasos no habilitados.

Por ejemplo, en noviembre del año pasado la Policía Fiscal Aduanera reportó que cayó una red de contrabando que operaba entre Venezuela y Colombia, especialmente en Cúcuta, mercado al que pudieron ingresar cerca de 384 toneladas de alimentos, lo que les reportaba ganancias de hasta $16 millones semanales.

Según indican las autoridades, si en Venezuela un kilo de carne se comercia aproximadamente en $4.200, en territorio nacional el valor puede ascender hasta $15.000.

“Esto es un trabajo que ahí va, con resultados que dejan mucho que desear. Si bien se ha parado un flujo grande de contrabando desde Venezuela, aún siguen pasando por trochas y a regiones con mafias que operan en toda la frontera. Hay que ser más eficaces”, aseguró el presidente de Fedegan, José Félix Lafaurie.