Ganado puede obtener 1,8 kilogramos por día con suplementación

Un bovino de mayor peso genera mayores ingresos y réditos para un ganadero, una misión  que cada día representa esfuerzos económicos y debe hacerse de manera inteligente para maximizar los beneficios. Los requerimientos nutricionales de cada animal no son iguales, ya que se deben tener en cuenta múltiples factores de acuerdo con el tipo de producción de cada ejemplar (leche, carne o doble propósito), así como la raza, edad, estado reproductivo o la cantidad de agua que, en ocasiones, es dejada en segundo plano por los productores respecto a la nutrición que se les brinda a los bovinos. 

No obstante, promedios en los últimos años en países ubicados en el trópico como Colombia, indican que un rango estimado con una nutrición integral basada en pasturas de calidad, forrajes, residuos de cosechas y cantidad de agua suficiente que aporten requerimientos minerales básicos como calcio, fósforo o potasio, entre otros, pueden otorgar ganancias de 500 gramos en bovinos destinados para explotación de carne. Sin embargo, esta cantidad puede elevarse hasta 1,8 kilogramos por día con una nutrición y dieta  rica en suplementos energéticos.

Juan David Córdoba, docente de la facultad de Ciencias Agropecuarias de la Universidad de La Salle, explicó que las ganancias de peso en los bovinos son muy variables de acuerdo al tipo de alimentación que se suministra en el hato. No obstante, “algunos reportes en Colombia mencionan que los novillos se sacrifican a los dos años con 450 kg, lo que supone que si nacen pesando aproximadamente 30 kg y durante 24 meses ganan 420 kg, se refiere a una ganancia diaria de peso de 575 gramos por día, en promedio”.

Ahora bien,“las ganancias diarias de peso varían a lo largo de la vida del animal, teniendo en cuenta periodos como lactancia, destete, levante y finalización, entre otros. Existe información de ganancias diarias de peso de hasta 1,8  kilos por día con base en formulaciones particulares de dieta rica en suplementos energéticos. Por tal razón, las ganancias de peso difieren mucho de acuerdo a la dieta suministrada en cada producción”, apuntó Córdoba. 

Por su parte, Leonardo López, médico veterinario de la Universidad de Antioquia, acotó que “es muy importante recordar la cantidad de agua mínima que debe consumir un bovino, no solo ya para su ganancia diaria sino para su salud en general y que también varía según edad y peso del ejemplar”. 

En este punto, los rangos pueden ir en terneros, de cinco a 15 litros de agua por día, hasta vacas de producción de 30 kg de leche que consumen de 90 a 150 litros de este líquido vital, en promedio. 

Sobre el uso de concentrado en los hatos, Córdoba indicó que ofrece un alto valor nutricional que favorece la optimización y potencialización en la producción de leche o ganancia de peso, dependiendo de su composición, teniendo en cuenta que se debe suministrar fibra en el alimento para estimular la rumia y favorecer el buen funcionamiento del tracto gastrointestinal del animal. Es así que se deben tener en cuenta las recomendaciones de la casa comercial de la que se obtiene el producto, para no superar las dosis máximas recomendadas y utilizar los parámetros de producción de leche y ganancia de peso diarias que aportan estas casas para compararlos con los de su ganadería específica. 

Es clave identificar las necesidades nutricionales específicas, con una correcta calidad y cantidad que “se verá reflejada en lotes de ganado con buenas condiciones corporales, adecuadas ganancias de peso (de acuerdo a los valores de referencia para la raza) y un chequeo periódico para hacer reajustes o correcciones en la dieta si es necesario”, concluyó Córdoba.

La nutrición en los terneros es vital para su inmunidad

De acuerdo con las recomendaciones de Juan David Córdoba, los terneros recién nacidos deben consumir calostro de excelente calidad en sus primeras horas de vida para asegurar una adecuada transferencia de inmunidad pasiva aportada por la madre a su cría. Asimismo, hay que tener en cuenta que los terneros tienen tasas metabólicas y demandas de energía altas por lo que deben tener una dieta rica en energía. Por último, también se deben considerar las características del forraje y otros recursos nutricionales que se aportan a los terneros y vigilar el periodo de destete en el que varían las ganancias de peso.