El huracán Helene azota el sur de los EE.UU. con las peores inundaciones en un siglo

El sur de Estados Unidos sufrió algunas de sus peores inundaciones en más de 100 años cuando los restos del huracán Helene avanzaron por la región, matando al menos a 52 personas, dejando sin electricidad a millones, estresando las represas y dejando atrás pérdidas potenciales de más de 100 mil millones de dólares.

Busick, Carolina del Norte, registró 29,59 pulgadas de lluvia, el máximo actual registrado en cualquier lugar, pero un área más grande en Georgia y Carolina del Sur recibió entre 11 y 14 pulgadas, dijo Brian Hurley, un pronosticador senior de la sucursal del Centro de Predicción Meteorológica de EE. UU., en una entrevista.

Los restos de Helene, que tocó tierra como tormenta de categoría 4 en Florida, estaban a unas 135 millas al oeste-suroeste de Louisville, Kentucky, la madrugada del sábado y estaban siendo absorbidos por un patrón meteorológico más grande.

Hurley afirmó que han pasado más de 100 años desde que la región sufrió una inundación tan grave. “En algunas de esas zonas, sin duda, hay que remontarse a más de 100 años, y en otras, a más de 300 años”.

Se pronostican pocas lluvias adicionales, lo que permitirá a los rescatistas salvar a los residentes y dar a los ríos, arroyos y represas la oportunidad de recuperarse lentamente de la tormenta, que tocó tierra en la zona de Big Bend en Florida el jueves por la noche. Sin embargo, la lluvia que cayó continúa estresando el sistema, por lo que persisten las advertencias y alertas de inundación. Kentucky y Tennessee están experimentando actualmente las peores lluvias.

Helene es el huracán más mortífero que ha azotado el territorio continental de Estados Unidos desde que Ian azotó Florida en 2022, matando al menos a 150 personas y provocando daños y pérdidas por 122.000 millones de dólares. En todo el sur, Helene ha matado a hasta 52 personas, según informó Associated Press.

Desde Indiana hasta Florida, más de 3,8 millones de clientes están sin electricidad, y Carolina del Sur representa aproximadamente el 28%, según PowerOutage.us.

Además, la tormenta puede ser una de las más costosas. Las inundaciones y la destrucción causadas por Helene pueden ascender a un total de entre US$95.000 y US$110.000 millones, según los cálculos de la empresa de meteorología comercial AccuWeather Inc., lo que la situaría fácilmente entre los cinco peores huracanes que han azotado Estados Unidos.

El presidente Joe Biden aprobó el sábado una declaración de emergencia para Tennessee, después de haberlo hecho a principios de semana para Carolina del Sur, Carolina del Norte, Alabama, Georgia y Florida.

Se han reportado daños generalizados, con agua fluyendo por las calles de muchas ciudades y pueblos, paralizando el transporte. Partes de la Interestatal 40, una importante carretera que va de este a oeste, han sido arrasadas.

“Todos los caminos en el oeste de Carolina del Norte deben considerarse cerrados”, dijo el Departamento de Transporte del estado en su sitio web. “A menos que busque un terreno más alto, los automovilistas no deben viajar en esta área”.

La presa del lago Lure, en Carolina del Norte, donde se filmaron escenas de Dirty Dancing, se desbordó y las autoridades temen que se derrumbe. Se ha ordenado a los residentes que viven en las calles situadas debajo de la presa que abandonen sus hogares y se han instalado refugios en las cercanías, según el sitio web de la ciudad.

Muchas otras presas de la región también están bajo presión. Las autoridades del este de Tennessee ordenaron evacuaciones cerca de la presa Nolichucky, que corría el riesgo de romperse a primera hora de la mañana del sábado. Los niveles de agua finalmente alcanzaron su punto máximo, de ocho pies por encima de la altura récord, y han comenzado a retroceder, dijo Elisabeth Thompson, consultora estratégica de alto nivel de la Autoridad del Valle de Tennessee.

“La presa Nolichucky está intacta”, dijo Thompson, “por lo que no hubo fallas, y nuestros equipos de seguridad de la presa están discutiendo los próximos pasos”.

Los avisos y advertencias de inundaciones repentinas aún se encuentran generalizados en todo el sur a medida que los ríos crecen debido a las recientes lluvias extremas.

Mientras tanto, la tormenta tropical Joyce y el huracán Isaac se mueven en el Atlántico central y actualmente no representan una amenaza para la tierra. Hay otras dos tormentas que podrían formarse la próxima semana, una cerca de Cabo Verde, frente a África, y otra en el Caribe occidental, cerca de donde se originó Helene.