Los yogures hechos sin lácteos, una tendencia que ha venido creciendo en Colombia

En la actualidad la leche está siendo sustituida por productos vegetales, especialmente entre las personas intolerantes a la lactosa o alérgicos, así como las personas que consumen una dieta vegetariana (principalmente los veganos, aquellos que no comen productos lácteos, huevos, ni cualquier otro producto que se derive de los animales). Así lo destacó Elincer Elles Navarro, docente de la Corporación Universitaria Rafael Núñez de Cartagena.

Precisamente, son los consumidores veganos los que han venido impulsando el mercado de los yogures sin lácteos. “Teniendo en cuenta la tendencia de las dietas vegetarianas, la producción de yogures no lácteos va en aumento, y son varias las empresas a nivel mundial que están elaborado dichos productos, marcas como So Delicious Dairy Free, Daiya Foods, Amande y The Hain Celestial Group se están posesionando en el mercado”, dijo Navarro quien además agregó que un informe de la firma de investigación de mercado Future Market Insights (FMI), el mercado global de yogures no lácteos aumentará en una tasa de crecimiento anual compuesta del 4,9% entre 2017 y 2027, en gran parte debido a la creciente población de jóvenes de la generación del milenio.

Por su parte, Celio Edilberto Pineda Rodríguez, coordinador de la unidad académica de procesos agroindustriales, carne y lácteos de la Universidad de Ciencias Aplicadas y Ambientales (Udca) agregó que, “en el mercado hay productos que simulan los productos cárnicos y además productos que buscan reemplazar los lácteos, algunos son con derivados de la soya.

Hablando específicamente de yogurt, y teniendo en cuenta las tendencias que hay de consumo, muchos buscan estos productos hechos sin lácteos, por eso la alternativa que está naciendo es utilizar leche de almendras o leche de soya”.

Y es que, entre los productos que están reemplazando la leche para elaborar yogures están entre otros, la leche de avena (agua filtrada, harina de avena entera), leche de soya, leche de almendras, semillas de cáñamo, anacardo y crema de coco.

En ese sentido, Ruth Mary Benavides Guevara, docente de la cadena de la formación en alimentos de la Unad dijo “actualmente desde la Cadena de Alimentos y el Grupo de Investigación Giepronal se vienen desarrollando diferentes proyectos que están buscando el aprovechamiento de diferentes proteínas vegetales como la quinua y el amaranto que son granos ancestrales que permita sustituir la proteína láctea de los yogures tradicionales”.

¿Cómo se hacen?
Pineda Rodríguez explicó que estas proteínas vegetales por sí solas no podrían utilizarse para hacer yogurt pues no tendrían una fuente para conseguir la fermentación que logran los lácteos. “Como con estos productos no se puede hacer que los yogures espesen lo que se hace es utilizar espesantes de origen vegetal para darles la característica de viscoso al yogurt. Además, se les puede dar sabor con frutas y al final se puede obtener un yogurt saludable”.