Aprenda a usar los bioinsumos para recuperar la tierra, el suelo y controlar las plagas

Una de las mejores formas para cuidar el bolsillo en su producción es mediante el uso de los bioinsumos. No solo en términos de costos si se le compara con lo que valen los químicos, sino porque recupera de mejor manera las propiedades de la tierra y del suelo donde se siembra.

Las definiciones de estos productos dependen de las regulaciones de cada país, en Colombia esa tarea le corresponde al Instituto Colombiano Agropecuario (ICA). Los bioinsumos no solo se enfocan en el manejo y control de plagas, sino que pueden ayudar a mejorar la productividad de cultivos y suelos.

“No son elaborados con químicos, pueden ser a partir de microorganismos, que en muchos casos son seres vivos como bacterias, virus, hongos, entre otros. Algunos son los insectos benéficos, que también son conocidos como macroorganismos y existen otros de escogencia natural que provienen de los extractos botánicos. También hay otros que se hacen con base a feromonas”, explicó Martha Gómez, directora de Vinculación de Agrosavia.

Gómez explicó que, desde la década de 1970, los bioinsumos han sido utilizados en la producción local, especialmente en cultivos como el café que desarrolló su centro de investigación (Cenicafe) desde 1938.

“En la actualidad se utilizan mucho para flores, en las camas de crecimiento de las plantas entran microorganismos como el hongo llamado trichoderma, que controla enfermedades del suelo y es el que más se usa a nivel internacional. Hay bastantes productos en el mercado local que nacen de él”, agregó.

También existen un gripo de bacterias llamadas bacilos, que se vende en el mercado internacional y que funcionan para controlar insectos plaga.

“Tenemos productos para arroz, flores, tomate, más recientemente con el tema de aguacate y las exportaciones. El biofertilizante es una estrategia muy buena. Hay unas bacterias que nos ayudan mucho para el tema del nitrógeno y fósforo del suelo, pero uno debe mirar qué necesita y en qué debe trabajar”, añadió.

Algunas bacterias tienen diferentes mecanismos de acción pueda solubilizar fosforo del suelo o hacen disponible el nitrógeno para las plantas. “Nosotros queremos desarrollar a través de esos microorganismos y complementar otro tipo de productos químicos. Si en un cultivo mezclo cierta cantidad de urea, al combinarlo con bioinsumos, baja las toneladas que uso, y ya representa algo muy importante, la opción es totalmente viable, se le puede aplicar abonos, entre otras estrategias”, dijo.

Según la directora, la idea es complementar y bajar dosis de productos químicos, “si tenemos todo este tipo de fertilización puede bajar lo que cuesta el cultivo. En otras siembras grandes como el maíz, sorgo, soya, podría reducir un porcentaje más alto de fertilización”.

Esto mejora mucho la salud de los suelos, recupera esos terrenos afectados por uso y abuso de tantas sustancias. “Hay cosas que uno puede hacer en la finca con protocolos especiales, hay que tener todo el tema de función de las fincas con microorganismos, toca tener mucho cuidado. Tienen que ser cosas muy estables. Uno puede usar los conocimientos ancestrales e intentar ayudar bajo la dosis correcta”, concluyó.