Un turista está dispuesto a gastar $1,1 millones diarios en planes de avistamiento

Tan solo en Colombia hay 279.000 posibles avituristas según cifras de ProColombia. Cada uno de ellos está dispuesto a pagar hasta $500.000 al día en sus visitas a los sitios de interés, contando guía, alimentación y estadía.

Lo mismo sucede con los visitantes extranjeros, quienes además duplican la cantidad de dinero que le pueden aportar al turismo, pues cada uno de ellos está dispuesto a pagar hasta $1,1 millones diarios, lo que equivale ingresos para el país cercanos a US$9 millones anuales.

Se calcula que existen aproximadamente 1.921 especies de aves registradas, de las cuales 79 son endémicas, es decir, propias del país, lo que lo ubica a nivel mundial como una de las naciones con más especies y le permite competir con otros en eventos como el Global Big Day, uno de los más grandes de ornitólogos del mundo. En esta cita se obtuvo este año el primer puesto con 1.546 especies registradas en 24 horas, a través de 4.840 listas, enviadas a eBird entre el 5 y el 9 de mayo, lo que representa 80% de las aves que surcan los cielos de Colombia.

Según datos de ProColombia, hay tres tipos de viajeros que hacen avistamiento de aves. El primero es el Hardcore, para personas con un alto nivel educativo, que invierten en equipo, ropa y demás accesorios que les permitan seguir su afición. Los Soft, con ingresos medio-altos que demandan calidad de guías y los aficionados a la actividad, quienes optan por tours con los alojamientos cómodos y las aves más llamativas.

El primer puesto obtenido por Colombia en el Global Big Day, es una muestra clara del auge que esta afición está tomando en el país, pues fue gracias al esfuerzo y dedicación de los organizadores a nivel nacional y departamental, así como de una gran diversidad de grupos principiantes, aficionados, científicos, organizaciones comunitarias, funcionarios de los diferentes Parques Nacionales y sociedades ornitológicas, entre otros, que salieron a pajarear el día que se logró obtener la distinción como lo resaltó la página de eBird Colombia.

Horacio Matarasso, presidente de la Feria de Aves de Sudamérica, dijo que “el aviturismo en Colombia está creciendo de una manera fabulosa. Por supuesto, ha habido mucho trabajo por parte del país, lo noto porque han tenido que arreglar primero el tema de inseguridad con la guerrilla”.

Por otro lado, el top cinco de departamentos para hacer aviturismo está conformado por Cauca, con 1.129 especies para ver, seguido de Antioquia, con 1.038; Valle del Cauca, con 1.024; Putumayo, con 967 y Meta, con 963. No obstante, Caldas no se queda atrás. Tiene más de 851 especies en su área geográfica, lo que ha hecho que el turismo en ese departamento crezca 14%, en parte por esta actividad recreativa.

Guido Echeverri, gobernador de Caldas, señaló que el departamento “tiene cerca de 40% de las especies de aves de Colombia y esto constituye una gran identidad para el mismo, el cual tiene que ser vendido como producto turístico”.

Agronegocios realizó un listado con algunas de las mejores especies locales.

Actitis Macularius

En español les dicen andarríos o meneaculito. Es un ave migratoria boreal, anida en Norteamérica y está presente en Colombia entre septiembre y abril. Habita en bordes de humedales, ríos y playas.

Chalcostigma Herrani

Este es un colibrí que habita en la alta montaña, en bosques altoandinos, páramos y superpáramos. Se alimenta de néctar y pequeños invertebrados que busca cerca del suelo.

Andigena Nigrirostris

Lo llaman tucán de montaña, terlaque o paletón. Habita en bosques de niebla es dispersor de semillas de árboles y está incluido en la categoría “casi amenazado” en Colombia.

Anisognathus Lacrymosus

Esta ave es principalmente frugívora y habita en bosques de alta montaña. Está en grupos forrajeando entre la vegetación, en compañía de otras especies de pájaros.

Anisognathus Somptuosus

Clarinero Primavera es un ave básicamente frugívora propia de la región Andina en Colombia. Viaja en grupos, a veces en medio de bandadas mixtas junto a otras especies voladoras.

Rupicola Peruvianus

Conocido como el dallito de roca. Es un frugívoro grande de bosques en buen estado de conservación. Los machos se reúnen en leks a cantar y bailar para atraer a las hembras.

Coeligena Torquata

Colibrí de bosques andinos, se mueve por el sotobosque buscando flores de bromelias y ericaceae. Los machos son de plumaje negro mientras que las hembras son verdes.

Piranga Rubra

Este pájaro es una especie migratoria boreal bastante frecuente en bosques, áreas cafeteras y zonas arboladas de las ciudades. Visita todo el país entre septiembre y abril.

Thraupis Episcopus

Se le llama también el azulejo, una de las aves más reconocidas en Colombia. Es común en zonas agrícolas y urbanas. Se alimenta básicamente de pequeños invertebrados y frutas.

Boissonneaua Flavescens

Un colibrí común en bosques de la región Andina. Es uno de los colibríes más territoriales, se le observa con frecuencia en peleas con otros picaflores en disputa por zonas de alimentación.

Melanerpes Rubricapillus

Le dicen comúnmente el carpintero, colonizó recientemente los valles interandinos de los ríos Cauca y Magdalena. Esta especie se suele encontrar en zonas arboladas y urbanas.

Coeligena Lutetiae

Colibrí de bosques de alta montaña y páramos. Se alimenta principalmente de flores de ericaceae, tiene una vocalización particular que facilita su ubicación e identificación en campo.

Fotos: Cotelco Caldas, Colprensa/Sergio Acero y Leidy Quesada.

*La descripción de las aves se hizo con la colaboración de Fernando Ayerbe, Investigador Asociado Wildlife Conservation Society - Programa Colombia.

Desmovilizados, los mejores guías del turismo de naturaleza

Mauricio Londoño es el fundador de Tinamú, un hotel en Manizales que se especializa en el avistamiento y que recibe más de 600 visitantes al año.

Para Londoño, el crecimiento en el número de turistas que están interesados en este segmento se da gracias a los acuerdos de paz. Además, aseguró que los desmovilizados serían los mejores guías por sus experiencias en las selvas colombianas.

¿Cuánto ha crecido el turismo en Manizales gracias al avistamiento?

Yo creo que se ha triplicado. Antes, Manizales no tenía tanto turismo, en buena medida por su aeropuerto que se cierra mucho por clima o por las cenizas. Ahora, de cada cinco turistas que llegan a la ciudad, al menos dos son para ver las aves.

¿Cuál es el país que más los visita?

Es curioso, son los holandeses. Yo no he podido saber por qué somos tan famosos allí; 22% de los extranjeros que vienen a este sitio son de Holanda, después vienen los estadounidenses, los ingleses, los argentinos y ahorita están llegando muchos asiáticos.

¿A qué se debe el aumento de visitantes?

Yo creo que haber firmado la paz. No es que sea santista, es que tenemos mucho que no habíamos podido mostrar. Hay sitios que los avistadores no han visitado como el Golfo de Urabá, el Tapón del Darién o partes de la selva de Florencia a los que no se ha podido ir porque se están desminando.

Le insisto, no soy santista, pero los mejores guías del turismo de naturaleza son los desmovilizados, pero no pueden ser guías porque no saben leer ni escribir. A personajes como esos no se les da la oportunidad de que presenten un examen con su conocimiento. Le aseguro que tienen más que todos nosotros.

¿Cuánto es el gasto promedio de una persona que hace avistamiento?

Las cifras dicen que un extranjero se gasta diariamente cerca de US$400, eso incluye dormida, transporte, guía y la alimentación. Un colombiano se debe gastar diario $500.000.

¿Cuál es el ave que más les gusta a los visitantes?

Los colibríes.

¿Cuánto le cuesta el mantenimiento de aves?

Yo nunca he podido lograr el punto de equilibrio. Me gasto por ahí $5 millones.