Papa y cacao son algunos de los cultivos que se verán afectados a largo plazo por El Niño

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El 22 de julio se reportó la altura más alta del mes en Cartagena con 38° centígrados, superando el límite récord por seis puntos (37,4°). Según la Jefe de la Oficina de Pronósticos del Ideam, Mayor Diana Carolina Rueda, este comportamiento se debe a que se está transitando hacia la temporada de lluvias en el Caribe.

“Lo que pasa es que estamos transitando hacia la temporada de lluvias y esto obliga a que tengamos unos días con unos alcances de temperatura mas altos a diferencia de junio. Estamos en temporada de ciclones tropicales, van a ingresar las ondas desde el Este y traerán lluvia y precipitaciones significativas para la región, y entraremos en la temporada de lluvias en la región Caribe colombiana y el Archipiélago de San Andrés y Providencia”, dice la Mayor.

Pese a que se descartó una ola de calor desde el grupo técnico del Ideam, gremios advirtieron que la dinámica productiva de algunos cultivos puede verse afectada en medio del fenómeno de El Niño. Álvaro Palacio, presidente ejecutivo de Asohofrucol, clasificó los efectos en un descenso en la producción en los cultivos de las regiones Caribe, Pacífica y Andina.

Leonardo Ariza, presidente de Acosemillas, coincide en que las regiones pueden verse afectadas de manera diferencial. “Los efectos específicos del fenómeno de El Niño en la agricultura colombiana pueden variar dependiendo de la región y de las prácticas agrícolas locales. Además, otros factores como la infraestructura de riego, las políticas agrícolas y la capacidad de adaptación de los agricultores también pueden influir en las consecuencias de esta temporada seca en la agricultura”, explica el directivo.

Además de tener afectaciones diferenciadas por región, el tiempo de duración también es un factor en el impacto a corto y largo plazo.

Corto plazo

De los principales cinco cultivos afectados, el banano es el único con efectos a corto plazo con la llegada del fenómeno del El Niño. El banano es 75% agua y si no hay agua no hay producción, según explican desde la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC). El impacto estaría en la productividad y en menos banano para exportar. También subirían los costos de algunas labores, como regar más horas o para captar agua de fuentes subterráneas.

José Francisco Zúñiga, presidente ejecutivo de Asbama, habló con LR sobre algunas acciones que podría hacer el sector productivo para ampliar la capacidad de carga de reserva de agua. “Se propone subsolar el suelo para mejorar la capacidad de infiltración, ajustar las fechas de aplicación del plan de nutrición, según el estado del tiempo del día, además de métodos y dosis; planificar fertirriegos técnicos para atender limitantes específicas de suelo y/o curvas de alta precisión que requieren mayor disponibilidad y aportes, e incorporar materia orgánica para afrontar posibles regulaciones de agua para riego de parte de los distritos”, describe.

Largo plazo

La caña es uno de los cultivos que se afectaría a largo plazo. El Fenómeno del Niño puede generar una reducción en la producción de caña de hasta un 7% anual, debido a la falta de disponibilidad de agua para riego del cultivo. Esto podría significar una reducción en la producción de azúcar de hasta 150.000 toneladas al año.

La panela tiene una afectación entre corto, mediano y largo plazo. A corto plazo El Niño aumenta la producción de panela porque las cañas rinden más al llevar menos agua en su interior. En el mediano y largo plazo el cultivo empieza a sufrir estrés por falta de agua y bajos rendimientos, incluso, dicen desde Fedepanela, que puede llegar a bajar el rebrote de las zocas.

La papa es uno de los cultivos de tierra fría que se podría afectar. Desde la SAC explican que El Niño seca los cultivos, y fomenta las plagas y enfermedades abundantes por la falta de agua. En el cultivo de papa no muchos productores cuentan con sistemas de riego, así que se sufre por la falta de agua.

El cacao es otro cultivo afectado. El ingeniero Rubén Darío Quiroga, de la Escuela Nacional de Formación de Fedecacao, señaló que si se prolonga la temporada de bajas precipitaciones, las fincas o predios por debajo de los 800 metros sobre el nivel del mar pueden tener abortamientos de pepinos inferiores a dos meses. La planta puede sufrir estrés hídrico y morir.

Desde Fedepalma, como el impacto estaría en menor disponibilidad de agua, el gremio hace recomendaciones como estar preparados para regar en épocas no usuales. “Hay que aprovechar residuos orgánicos que absorban el agua y cubran el suelo para mantener hidratadas las raíces de la palma, y agilizar los planes de fertilización”, explican en un informe sobre los impactos climáticos en la agricultura, de la SAC. Y advierten, además, que hay que reconsiderar la siembra de palma para las zonas Norte, Central y Oriental durante el segundo semestre, ya que para el primer semestre se tendría alta probabilidad de estrés.

Se prevén altas temperaturas

Se espera que en el próximo semestre, de agosto de 2023 a enero de 2024, se aumente la temperatura con respecto a los promedios históricos entre 0,5° y 2,5° en la mayor parte del país
Además, durante el trimestre consolidado de agosto a octubre de este año, habrá déficit entre 10% a 20% con respecto a las precipitaciones en algunas zonas del país, según el Ideam.

Recomendaciones a productores agrícolas durante el fenómeno de El Niño

Desde Acosemillas se entregaron recomendaciones para lidiar con las afectaciones de El Niño en los cultivos. En primer lugar, se promueve monitorear los pronósticos climáticos, planificar el uso del agua, diversificar sus cultivos, mejorar la gestión del suelo, utilizar las prácticas de conservación de agua y buscar asesoramiento técnico. “Es fundamental trabajar de manera coordinada y colaborativa para proteger nuestras siembras y garantizar la seguridad alimentaria en Colombia”, indicó Leonardo Ariza, el presidente de Acosemillas.