Nueva regulación de la UE afectaría capacidad financiera de pequeños cacaocultores

A mediados de diciembre del año pasado, delegados de la Unión Europea anunciaron una nueva normativa que impactaría directamente al agro, pues prohibiría las importaciones de ciertos productos de países que deforestan, entre los que están el cacao, café, aceite de palma, soja, madera, caucho, carbón vegetal, productos del ganado y papel impreso.

En abril esa normativa fue aprobada por el Parlamento Europeo y está a punto de ser ratificada por el Consejo de dicha comunidad política. Pero ante dicha regulación, desde algunos sectores como el cacaotero mostraron cierta preocupación por las dificultades que puede traer al gremio.

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El sector cacaotero logró avances importantes con la implementación del Acuerdo Cero Deforestación de la cadena de valor, que tiene como objetivo consolidar una industria sostenible que protegiera el medio ambiente, pero organizaciones como Asilos advierten de que dicha regulación podría afectar la capacidad financiera de los pequeños productores y agricultores familiares.

“Si bien es un paso significativo para la protección de los bosques, debemos tener en cuenta el impacto que tendrá en los pequeños productores y en la consolidación de la paz en Colombia, pues, de no tener instrumentalización, puede constituir una ‘barrera de mercado’ que, aunque se exige al comercializador, no se indica quién asumirá los costos del sistema de monitoreo y trazabilidad, y existe el riesgo de que este costo se transmita al pequeño productor y agricultor familiar ahogando su capacidad financiera”, explicó Wendy Arenas, director de la organización Asilos.

La experta también aseguró que la nueva regulación de la Unión Europea puede disminuir el ritmo y alcance de la consolidación de la paz. “Si se tiene en cuenta que el cacao ha sido una de las principales estrategias para el postconflicto, solo en 2022, más de 47.000 hectáreas de cultivos ilícitos fueron sustituidos por cacao, porque ahora tenemos un requisito adicional que los productores no van a poder cumplir”.

Colombia firmó el Acuerdo de Cacao, Bosques y Paz en 2018 para cerrar la frontera agrícola y aportar a la implementación del Acuerdo de Paz. “El acuerdo cuenta con más de 25 adherentes, incluyendo 90% de la industria nacional y los ministerios de Ambiente y Desarrollo Sostenible y Agricultura y Desarrollo Rural y convirtió a Colombia el primer y único país de América Latina con este tipo de iniciativas”, agregó.

Arenas instó a crear acuerdos comerciales bilaterales con la Unión Europea para exportar hasta 35.000 toneladas para 2030, como alternativa para mitigar los efectos negativos de la regulación.

Finalmente explicó que es crucial garantizas las condiciones necesarias para que la implementación de esa regulación beneficio a los países productores y consumidores, además de establecer un diálogo con los países de dicha comunidad política.