Conozca cuáles son las herramientas que no le pueden faltar en su labor del campo

Desde hace mucho tiempo, la agricultura es considerada como la base principal de la alimentación y el desarrollo humano. Aunque el auge de la tecnología transforma muchos procesos, las herramientas manuales siguen siendo parte importante en el trabajo diario del campo. Cada uno de estos instrumentos cumple un rol fundamental para facilitar la preparación del suelo, la siembra, el mantenimiento y la cosecha.

Marco Tulio Vanegas Céspedes, zootecnista y agrícola con más de 40 años de experiencia, afirmó que “en el desarrollo de los procesos productivos de la agricultura es necesario la utilización de herramientas en la preparación y adecuación del terreno para la optimización en el desarrollo normal de nuestros cultivos”.

Si hay una herramienta que no puede faltar en el agro y todas las actividades que este implica es la pala. Su diseño permite realizar múltiples tareas, desde cavar surcos y hoyos, hasta mover la tierra, el abono y otros materiales esenciales para el cultivo. No obstante, existen diferentes tipos de palas según la necesidad, como, por ejemplo, las cuadradas, que son ideales para trasladar materiales sueltos como arena o compost; las redondas, por su parte, son perfectas para excavar; y el tipo escarramán, diseñadas para trabajos que requieren mayor precisión.

Jorge E. Valencia, jefe de calidad Herragro, añade que “las herramientas fundamentales para cualquier agricultor incluyen la pala, el azadón, el machete, etc. Estas herramientas son indispensables en el manejo diario de los cultivos y en tareas como cavar o cortar”,

De igual manera, para aquellos suelos que sean duros y difíciles de trabajar, el pico es una herramienta relevante. Por su cabeza metálica y mango resistente ayuda a romper con mayor facilidad la tierra que está compactada, para facilitar la preparación del terreno antes de la siembra. Su uso es especialmente útil en regiones donde la tierra se endurece a causa de la falta de humedad o por la presencia de piedras y raíces.

Existen diferentes tipos de picos según su función. El talacho, por ejemplo, es ideal para poder abrir zanjas y remover suelos que estén duros, mientras que el zapapico cuenta con la combinación de pico y azuela, la cual es útil para cortar raíces y desenterrar plantas no deseadas en su jardín.

El infaltable machete....

Ahora bien, en muchas regiones agrícolas, el machete es considerado una herramienta esencial. La hoja larga y afilada con la que cuenta ayuda a cortar maleza, ramas e incluso facilita la tarea de cosechar algunos alimentos, como la caña de azúcar y el banano. También es clave para el mantenimiento de los terrenos, pues facilita actividades como el despejar áreas y controlar el crecimiento excesivo de vegetación que puede afectar los cultivos. “Es importante mencionar que las necesidades pueden variar según el tipo de cultivo. Por ejemplo, en cultivos de poda intensiva se necesitan tijeras y rastrillos, mientras que en otros no”, comentó Valencia.

Otra de las herramientas esenciales para la agricultura es el rastrillo, especialmente en la fase de preparación del suelo, dado que sus dientes metálicos o plásticos permiten nivelar la tierra, eliminar residuos y distribuir fertilizantes de manera mucho más uniforme.

Finalmente, otro de los instrumentos que no pueden faltar en el campo es la azada. Su diseño permite remover la tierra alrededor de las plantas, pues evita que estas mismas se compacten en el suelo y mejora la absorción de agua. En igual medida es muy efectiva para controlar la maleza, ya que ayuda a eliminar las malas hierbas sin afectar los cultivos principales.

Es necesario recordar que el éxito de una cosecha no solo depende de la calidad de las semillas o del clima, sino que también en el uso adecuado de las herramientas agrícolas. Contar con las diferentes herramientas es un factor clave a la hora de marcar la diferencia en la productividad y la comodidad del agricultor.

Por lo cual, Valencia concluye que “es crucial optar por herramientas fabricadas con materiales de alta calidad que garantizan una mayor durabilidad y resistencia, y es muy importante también considerar que estos instrumentos sean producidos mediante prácticas sostenibles que minimicen la huella ambiental”.

A pesar del avance tecnológico, las herramientas manuales son uno de los pilares más significativos de la agricultura y el vínculo directo que hay entre el agricultor y la tierra misma. Sin ellas, indudablemente, el campo no sería igual.