“Colombia es país pionero en el mercado de bonos de carbono por su biodiversidad”

El mercado de bonos de carbono es uno de los que mayor potencial proyecta en medio de la crisis climática que atraviesa el mundo. Este funciona mediante la compra y venta de créditos que representan la captura de una tonelada métrica de CO2.

Alexis Leroy, CEO y fundador de Allcot, una empresa suiza que se dedica a trabajar con comunidades, organizaciones y gobiernos para acelerar la transición a carbono neutralidad, hizo una radiografía del mercado colombiano y habló de su potencial.

¿Cuál es el origen de Allcot?
Allcot es una compañía que se dedicó en su primera etapa a la mitigación y adaptación climático a través mecanismos de mercado. Somos una empresa con ánimo de lucro, no una fundación. Ahora queremos impactar en la agenda 2030, especialmente en el Objetivo de Desarrollo Sostenible de acción climática a través de proyectos y soluciones en lo ambiental, social y económico.

¿Cuántos proyectos han desarrollado en el mundo?
Allcot ha desarrollado 254 proyectos, la mayoría de ellos ubicados en África, América Latina y el Caribe, pero también en Europa y Asia. Durante 2022, facilitó la emisión de aproximadamente 10% de los créditos de carbono en el mundo.

Actualmente tenemos acuerdos firmados con 13 gobiernos nacionales y regionales para la exploración y elaboración de proyectos de carbono en América Latina y África.

¿Cuánto puede crecer este mercado en el mediano plazo?
No puedo darle un número pero sí el alcance. Colombia pretende reducir sus emisiones en 51%, pero es responsable por menos de 1% de las emisiones internacionales. El mercado colombiano con el impuesto al carbono está más o menos a US$5 por tonelada de CO2, equivalente para la nueva tributación voluntaria de del impuesto Estados Unidos que pretende también reducir su emisión de 50% de aquí al 2030.

Si realmente quieren un mejor performance y no contaminar tanto, tienen que invertir pues a lo mejor US$100 y US$150 por tonelada métrica de CO2. El Banco Mundial y varios estudios demostraron que, si queremos lograr la meta de 1,5°, necesitamos un precio al carbono internacional promedio de US$70 a US$100 por toneladas de CO2.

¿Qué retos tienen con las comunidades con las que trabajan?
Uno de nuestros oficios principales desarrollar estos proyectos siempre por cuenta de las comunidades en el caso de los bosques y con los campesinos cuando son proyectos agrícolas o plantas de compostaje.

Los bonos de carbono son una herramienta financiera, es decir, permite refinanciar actividades productivas con naturaleza, e incentivan a las comunidades a cambiar su percepción de la misma y verlo como en fuente de ingreso que hay que conservar y no como una oportunidad de explotación a muy corto plazo.

¿Ven potencial en el mercado colombiano?
Colombia es un país pionero en el mercado de bonos de carbono y estos proyectos tienen un ciclo de vida de hasta 40 años. Hay unas riquezas extraordinarias en biodiversidad. Dentro de nuestro oficio es un sitio en el cual podemos enseñar y demostrar varios de nuestros proyectos pilotos.