Asbama y el ICA continúan con las operaciones para el manejo de hongos en la Costa

Luego de la primera aparición del hongo FocR4T en los cultivos de banano, se ha vuelto necesaria la toma de medidas con el fin de mitigar los impactos de este fenómeno en el producto del norte del país.

Asbama, junto con el Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, han comenzado un estudio con los pequeños productores de las regiones de Cesar, Magdalena y La Guajira. Esto tiene el objetivo de entender la forma en como los cultivadores observan las problemáticas de las plagas y las enfermedades en sus productos.

Antonio Escorcia, antropólogo, es quien lidera el estudio y enfatiza su énfasis en la Fusarium Raza 4 Tropical, el hongo que puede representar una problemática para los bananeros en un plazo inmediato.

“El año pasado lo que hicimos fue una cartografía del riesgo en la que se tomaban los puntos críticos donde hubiera mayor incidencia o menor control de parte de los productores para el manejo fitosanitario. En ese trabajo se señalaban los puntos de riesgo, que equivale a un manejo, más o menos consciente de lo que es la finca, la zona segura, donde ellos no tenían una noción o un intento de intervenirla y la zona de riesgo, de peligro, donde ya no podían tener control”, dijo el investigador.

De la mano con el estudio, también se están realizando encuestas y talleres para que las normativas fitosanitarias se cumplan en cada una de las regiones. Asbama dijo que el hongo ha tenido un foco mayor en la Costa Norte del país, en donde se presenta una mayor actividad en operaciones de control, prevención y manejo de la problemática.

“Si he notado diferencia con respecto a los tipos de perfiles de los productores, dado que, en el caso de Cesar, los cultivadores están inmersos en una lógica de producción a fin a la seguridad alimentaria, y las condiciones hacen que tengan una diversidad de cultivos; a diferencia de lo que ocurre en el Magdalena, donde está más abocado a la parte de la producción nacional del banano. Entonces a nivel productivo se notan ciertas diferencias y, por otro, el tema del manejo fitosanitario es un poco más laxo, en el Cesar que en el Magdalena”, concluyó Escorcia.